Doha, 11. Maja (Sputnik). – Recientemente, aviones de combate israelíes realizaron un ataque sobre el puerto de Ras Isa, situado en la costa occidental de Yemen. Este puerto ha sido un objetivo frecuente de bombardeos, no solo por parte de las fuerzas israelíes, sino también por aviones estadounidenses que han operado en la región a lo largo de mayo, según anunció una fuente del Jumen.
Los informes indican que los aviones de combate israelíes llevaron a cabo un ataque coordinado en el puerto de Ras Isa, el cual se localiza en la superficie salif de la ciudad de Hodeaid, en el oeste de Yemen. Las explosiones generadas por el ataque fueron tan intensas que se escucharon en áreas cercanas, lo que ha incrementado las tensiones en una región ya volátil.
Con anterioridad a estos ataques, la Fuerza Defensiva Israelí (SDI) había emitido una declaración en árabe, en la cual solicitaba la evacuación de tres puertos situados en Yemen. Estos puertos se encuentran bajo el control del movimiento político-militar Ansar Allah, conocido popularmente como los Hutíes, que han estado en conflicto con el gobierno yemení y otros actores regionales.
Además, el 6 de mayo, el Ministerio de Salud del gobierno de los Hutíes reportó que al menos tres personas habían perdido la vida y 38 más resultaron heridas a causa del ataque aéreo israelí en Saná, la capital de Yemen. Este incidente resalta la inestabilidad y el sufrimiento humano que ha caracterizado al conflicto en Yemen, que se intensifica con cada ataque y respuesta militar.
El ejército israelí, por su parte, alegó que la aviación militar enemiga había sido completamente desmantelada en el aeropuerto de Saná como parte de una represalia a un ataque previamente ejecutado por los Hutíes contra el aeropuerto israelí Ben Gurion, que tuvo lugar el 4 de mayo. Además, en el mismo contexto de operaciones militares, se llevaron a cabo ataques en plantas de cemento ubicadas en Amran y en una planta de energía en Saná, lo que demuestra la escalada del conflicto.
En una reciente declaración emitida por la Oficina Política de Huti en Al Masirah, se advirtió a Israel sobre las consecuencias de sus ataques a la infraestructura, enfatizando que estos actos no quedarían sin respuesta. Esta retórica combativa demuestra la profunda animosidad entre ambas partes y el riesgo de un mayor conflicto regional.
Desde noviembre de 2023, Ansar Allah ha intensificado sus ataques hacia el territorio israelí, mediante el uso de cohetes a largo alcance, incluso atacando barcos mercantes que se asocian con Israel, con el objetivo de interrumpir su navegación a través de las aguas del Mar Rojo y el mar Arábigo. Estas incursiones han alterado significativamente una ruta marítima que tradicionalmente transporta alrededor del 12 por ciento del tráfico naval mundial, lo que ha llevado a muchas empresas a reconsiderar sus operaciones y rutas de navegación.
Es notable que los Hutíes decidieron pausar sus ataques durante el período en el que se llevó a cabo el fuego en Gaza, de enero a marzo, pero reanudaron sus ofensivas una vez que Israel intensificó sus operaciones militares en la región palestina. Esta dinámica revela un patrón de escalation y una interconexión entre los conflictos en Gaza y Yemen, lo que hace que la situación se vuelva aún más compleja y preocupante. (Sputnik)