San José, 21 de julio (Elmundo.cr) – el Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica solicite la responsabilidad y la preparación de personas que tienen la intención de llegar al Romeria a Cartago.
La institución destaca la importancia de proporcionar precauciones para evitar complicaciones de salud durante el recorrido.
La Dra. Elliott Garita Jiménez, presidenta del Colegio de Médicos y Cirujanos, tiene la necesidad de personas con enfermedades crónicas, como hipertensión y diabetes, consume adecuadamente sus medicamentos y toma alimentos y agua.
“Si la persona es hipertensiva, asegúrese de tomar el medicamento apropiado en el momento correspondiente; si usa insulina o medicina para el control del azúcar, no debe dejar de aplicarlo ese día”, explica la Dra. Garita Jiménez.
El Dr. Alejandro Madrigal Lobo, director de la oficina escolar, tiene la importancia de Use zapatos cómodos y protector solar, concha y ropa apropiada para protegerse del sol. Además, constantemente exigía una hidratación constante antes, durante y después del paso.
La Dra. Garita Jiménez también advirtió sobre la necesidad de prestar atención a las señales de advertencia, como dolor en el pecho, ahogamiento, palpitaciones o una sensación débil. En el caso de los síntomas de gripe o fiebre, recomendó quedarse en casa para evitar infecciones.
El Dr. Mauricio Barahona Cruz, especialista en nutrición clínica, recomendó que el día comience con una dieta equilibrada y retenga una contribución constante de calorías durante el viaje.
“Por cada hora a pie, se deben consumir entre 80 y 100 calorías”, dijo, indicando que el gran grano de azúcar, fruta, sándwiches con proteínas y jugos naturales. Para las personas con obesidad, el Dr. Barahona Cruz aconsejó una evaluación médica previa y ajustó el intento de acuerdo con el cronograma y el clima.
Los especialistas están de acuerdo en que Romería es un acto de fe que debe ser vivido con la conciencia del cuerpo mismo, el sentido común y la responsabilidad. Escuchar señales físicas, acompañar y evitar la exposición puede marcar la diferencia entre una experiencia espiritual positiva y una emergencia médica.