Carthage, sep (Elmundo.cr) – El Marta, refugio de vida silvestre Se encuentra en el área de conservación del curso biológico de Costa Rica, y abre un nuevo llamado para grupos de voluntarios nacionales e internacionales que desean unirse al Protección de más de 1,500 hectáreas de bosque. Este curso biológico es la clave para el flujo de flora y fauna en diferentes regiones del área nacional e incluso más allá de nuestras fronteras, lo que hace que el refugio sea un espacio de alto valor ecológico.
Un sitio de este alcance requiere un mantenimiento constante, especialmente en las áreas de amortiguación abiertas al público. La participación de estas personas es esencial, ya que permite a más usuarios visitar el sitio.
Las actividades voluntarias varían según la época del año y cumplen con el plan operativo del lugar. Esto incluye el mantenimiento y la mejora de las carreteras, el apoyo en áreas de investigación, los efectos de los signos y estructuras, los espacios de limpieza y otras tareas que garantizan tanto la seguridad de los visitantes como la protección del ecosistema.
“El refugio de vida silvestre Marta es parte del proyecto de conservación y educación ambiental de la Universidad Castro Carazo. Futuro”, dijo Marichen Lang, Vict, Vichen.
Uno de los desafíos más importantes de Marta es capacitar a los ciudadanos con una sólida conciencia ambiental. El objetivo no es solo reducir el daño ya hecho, sino promover una cultura diaria de cuidado natural. Mantener el bosque en su estado más puro es un esfuerzo que requiere compromiso, no solo los recursos financieros. Por lo tanto, el voluntariado se convierte en una contribución fundamental: más que la fuerza laboral, es un espacio para compartir ideas y crear un sitio web para la conservación, la relajación y el contacto real con la naturaleza.
“Los requisitos para participar son simples: una buena actitud, amor por la naturaleza, proactividad y mentalidad para proponer mejoras. Aunque algunas actividades requieren un esfuerzo físico, no es necesario tener una condición excelente; incluso el trabajo pequeño puede marcar una gran diferencia en la protección de este ecosistema”, dijo el portavoz.
Ser parte del voluntario en Marta es una experiencia enriquecedora. Los participantes se convierten en ‘poder verde’, contribuyen activamente a la mejora del medio ambiente y dejan una marca en la conservación. Cada hora donada significa una contribución invaluable al futuro del planeta y otro paso hacia un mundo sostenible.
Las personas interesadas en unirse a esta iniciativa pueden comunicarse con WhatsApp +506 8743-9822 o al correo electrónico [email protected] y [email protected] para recibir más información y coordinar su participación.