El comienzo de la semana estuvo marcado por un ambiente optimista en los mercados financieros globales, aunque en un contexto de notable divergencia. Mientras los mercados de valores europeos celebraban con entusiasmo el aparente alivio en las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, el mundo financiero de Nueva York experimentaba una jornada de alta volatilidad y precaución, que finalmente moderó las ganancias iniciales debido a la incertidumbre persistente en torno al futuro de las tasas de interés.
El optimismo se vio impulsado el lunes por la exención temporal de tasas a productos electrónicos en Estados Unidos, lo que se tradujo en un aumento de la confianza incluso en los mercados europeos, aunque las fluctuaciones en Nueva York apuntaban a una mayor cautela.
Durante el inicio de la semana, los mercados financieros globales vieron un progreso notable, impulsados por el alivio en las tensiones comerciales entre las dos potencias económicas más grandes del mundo, tras la decisión del presidente Donald Trump de eximir temporalmente ciertos productos electrónicos de las tarifas arancelarias de importación.
Sin embargo, la incertidumbre sobre el alcance y la duración de esta medida moderó el optimismo inicial de los inversores en Wall Street. A pesar del entusiasmo que se generó ante un posible alivio en las tensiones comerciales, el mercado reaccionó con cautela. Las acciones de Estados Unidos redujeron sus ganancias tempranas, ya que los inversores reassumían una postura más analítica respecto a la exención de tarifas promovida por Trump sobre productos tecnológicos.
El índice S&P 500 experimentó una leve subida del 0.3%, mientras que el Nasdaq, centrado en tecnología, alcanzó un incremento del 0.2%. Por su parte, el promedio industrial Dow Jones solo avanzó un modesto 0.1%, lo que distaba considerablemente de las alentadoras proyecciones observadas en la preapertura del mercado, donde se esperaban ganancias superiores al 1%.
Trump y sus asesores dejaron a la comunidad financiera en una situación ambigua sobre el futuro de las tarifas dirigidas a sectores específicos de China durante el fin de semana. Empresas de tecnología de gran capitalización, como Nvidia y Apple, inicialmente recibieron buenas noticias al enterarse de que Estados Unidos había excluido las tarifas aplicadas a teléfonos inteligentes, computadoras y otros dispositivos electrónicos de consumo.
Entretanto, Howard Lutnick, Secretario de Comercio de Estados Unidos, alerta el domingo que estos productos electrónicos estarían pronto sujetos a impuestos, que serían independientes de tarifas específicas hacia países determinados. Este mensaje contrastó con el optimismo inicial del mercado, generando una atmósfera de confusión.
Adicionalmente, Trump reforzó la confusión comunicando en una declaración extensa por redes sociales que no habría «excepción» alguna para esos productos electrónicos. Mencionó que se observarían atentamente los semiconductores y todas las cadenas de suministro relacionadas en futuras investigaciones sobre tarifas de seguridad nacional.
A pesar de las contradicciones en los mensajes emitidos por la administración Trump, el anuncio inicial elevó el ánimo de los inversores, ya que las acciones de Apple lograron un hilo de impulso significativo. Esto ocurre en un contexto donde las tensiones entre Estados Unidos y China siguen siendo un tema candente.

También se deben considerar las decisiones de China, que anunció un aumento de tarifas en productos estadounidenses de hasta el 125% el pasado viernes, en respuesta a la escalada de Trump en las importaciones. Esta dinámica de «ojo por ojo» ha suscitado preocupaciones sobre el potencial impacto negativo en la economía global.
Analistas advierten que esta fricción comercial entre Estados Unidos y China podría acarrear consecuencias perjudiciales a nivel macroeconómico, llegando incluso a provocar una posible recesión global, aunque Trump había anunciado un enfoque de 90 días sin tarifas hacia otros países, excepto hacia China.
Europa contribuye al optimismo
Los mercados de acciones europeos cerraron la jornada con incrementos significativos, promediando cerca del 2%, impulsados por la expectativa de negociaciones sobre tarifas con Estados Unidos. La Bolsa de Milán fue la que lideró las alzas con un 2.88%, seguida por Frankfurt (2.85%), Madrid (2.64%), París (2.37%) y Londres (2.14%). También, el índice Euros STOXX50 se elevó un 2.59%.
La atención en Europa se concentra en la visita del Comisionado de Comercio Europeo, Maros Sefcovic, a Washington con el objetivo de discutir tarifas y las contramedidas que Bruselas había anunciado en respuesta a los aranceles sobre el acero y el aluminio. Este viaje es fundamental, especialmente tras la suspensión temporal de tarifas y contramedidas por parte de Trump, que se extiende a 90 días.
Además, los mercados europeos también se benefician de datos positivos en cuanto a la confianza empresarial, que presentó una mejora del 0.1% en el segundo trimestre, comparado con cifras anteriores, a pesar de las preocupaciones levantadas por el anuncio de Trump.
Las bolsas asiáticas responden positivamente
Los mercados asiáticos también mostraron una respuesta positiva. El índice Hang Seng en Hong Kong aumentó un 2.4%, alcanzando los 21,417.40 puntos, mientras que el índice compuesto de Shanghai cayó un 0.8%, cerrando en 3,262.81, en el contexto de que el gobierno reportó un aumento del 12.4% en las exportaciones de China durante marzo en comparación con el año anterior.
Este crecimiento se atribuye a un aumento en la actividad por parte de las empresas que tratan de adelantarse a los posibles aumentos de tarifas estadounidenses. Por su parte, el índice Nikkei japonés subió un 1.2% a 33,982.36 puntos, y el Kospi de Corea del Sur ganó un 1% hasta los 2,455.89 puntos.
Las acciones de empresas tecnológicas asiáticas también vieron incrementos considerables: Tokyo Electron subió un 1.4%, Avantest un 4.9%, y Samsung Electronics aumentó un 1.8%. Sin embargo, el único mercado que mostró una ligera disminución fue Taiwán, cuyo índice Taiex cayó un 0.1%, un reflejo de la preocupación por los recientes anuncios de Trump sobre tarifas que se esperan impacten a la industria de chips en la próxima semana.

Bonos y materias primas
El mercado de bonos de Estados Unidos, que había mostrado señales de alarma la semana pasada, logró cierto alivio. La rentabilidad de los bonos del Tesoro a 10 años cayó al 4.44% el lunes por la mañana, tras haber superado el 4.58% el viernes anterior, aunque permanecía por encima del 4.01% registrado una semana antes.
En el ámbito de la deuda europea, el interés en los bonos alemanes a largo plazo aumentó a 2.534%, mientras que los bonos españoles bajaron a 3.245%, con una prima de riesgo situada en 71 puntos básicos.
El mercado del petróleo exhibió una notable volatilidad; el Brent, referencia en Europa, descendió un 0.7% hasta los $64.30, y el West Texas Intermediate (WTI) cayó un 1% a $60.87.
Bitcoin, por su parte, también se unió a las pérdidas, con una disminución del 0.8%, registrando un precio aproximado de $82. Los inversores continúan atentos a la reunión programada del Banco Central Europeo para el miércoles y jueves, donde se especula sobre la posibilidad de un recorte de interés de 0.25%, así como la expectativa sobre el informe mensual de la OPEP que se dará a conocer en los Estados Unidos.