La policía encargada de la seguridad en las prisiones ha realizado una incautación significativa, confiscando más de 10 gramos de marihuana que estaban ocultos dentro de tubos de pasta dental, destinados a ser introducidos en dos diferentes centros penitenciarios del país. Este hallazgo pone de manifiesto la constante lucha de las autoridades para prevenir la entrada de sustancias ilícitas en las instalaciones carcelarias, una problemática que persiste como uno de los desafíos más graves en el sistema penitenciario.
De acuerdo con la información proporcionada por el Ministerio de Justicia y Paz, el primer incidente tuvo lugar en la prisión de Limón. Durante una revisión rutinaria, las autoridades descubrieron un contenedor de pasta de dientes que, a simple vista, parecía inofensivo. Sin embargo, tras una inspección más detallada, las tropas hallaron 8.7 gramos de marihuana ocultos en su interior. Este descubrimiento subraya cómo los traficantes a menudo recurren a métodos ingeniosos para intentar burlar la vigilancia de los funcionarios de prisiones, utilizando objetos cotidianos para esconder drogas.
El segundo caso relevante ocurrió en la prisión de Alajuela, donde las fuerzas del orden encontraron un total de 4.5 gramos de marihuana en circunstancias similares. Estos operativos reflejan la vigilancia constante que tienen las autoridades en los recintos carcelarios, donde cada envío y paquete es cuidadosamente examinado para evitar que los reclusos tengan acceso a sustancias prohibidas que pueden alterar el ambiente dentro de las prisiones.
Las imágenes que fueron compartidas por las autoridades revelan el proceso de incautación. En las fotografías se observa cómo los oficiales extienden el producto incautado sobre un plato para ilustrar la manera en que había sido escondido. Este tipo de visualización es importante, ya que ayuda a crear conciencia sobre las técnicas utilizadas por quienes intentan introducir drogas en los centros penitenciarios, así como también a demostrar la eficacia del trabajo realizado por las autoridades en la detección de estos contrabandos.
Las personas que intentaron hacer entrar la marihuana en los centros penitenciarios han sido llevadas ante el Fiscal para que se determine su situación legal. Este tipo de acciones son cruciales para garantizar que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos y que se mantenga la seguridad dentro de las prisiones. Mantener el control de las drogas en estos entornos es esencial no solo para la seguridad de los reclusos, sino también para el personal que opera dentro de estas instalaciones y para prevenir la proliferación de actividades ilícitas dentro del sistema penitenciario.