Chaves cuestiona las preocupaciones del TSE sobre sus acciones: ¿una cuestión de estupidez o de mala fe? ¿Se trata de una incapacidad o de corrupción? Estas preguntas surgen en el contexto de la reciente controversia que rodea al Presidente de la República, Rodrigo Chaves, quien no ha dudado en criticar las precauciones impuestas por el Tribunal Electoral más alto (TSE) en relación a su comportamiento político y sus acciones como presidente.
Todo comenzó cuando se presentó una protección electoral impulsada por el político presidencial y solicitante Claudio Alpízar. Este último acusa a Chaves de utilizar recursos oficiales con el propósito de promover su propio proyecto político y de obtener beneficios de manera inapropiada para las elecciones venideras. Ante esta acusación, el TSE decidió emitir una advertencia al presidente, instándole a abstenerse de realizar cualquier tipo de manifestación o actividad que pudiera comprometer el principio fundamental de imparcialidad constitucional. Estas actividades abarcan cualquier declaración que pueda afectar de manera positiva o negativa a partidos políticos, candidatos o postulantes para el proceso electoral de 2026.
En medio de esta tensión, Chaves expresó su confusión y frustración respecto a las acciones del TSE, manifestando: “¿Qué es? ¿Tropidez o mala fe? ¿Discapacidad o corrupción?” El presidente dejó en claro que, en su opinión, no hay un término medio en esta situación que pueda justificar las medidas que se están implementando en su contra. Con un tono sarcástico y desafiante, además comentó: “El recurrente vale un pepino. Sea lo que sea que valga, no lo sé. Quién sabe, no sé quién es él,” lo que refleja su desdén hacia las que considera acciones sin fundamento en su contra.
Chaves también dirigió su atención hacia una magistrada del TSE, Zetty María Build, quien, según él, no tiene el conocimiento necesario sobre lo que está en juego o actúa deliberadamente en su contra. “El jaguar desaparece del imaginario del público sin un juego con ese símbolo”, continuó, refiriéndose a la metáfora utilizada en la política nacional.
El presidente finalizó su discurso señalando: “Dios mío, Dios mío. Mira lo que está sucediendo en Costa Rica. Y esta es nuestra Corte Suprema de Elecciones. La que tiene que monitorear que la democracia de esta patria, que incluye el debate público sobre ideas, se mantiene en este país,” lo que podría interpretarse como una crítica a la capacidad del TSE para salvaguardar la democracia y el debate político en la nación.
Adicionalmente, el gobierno ha aclarado que el símbolo del jaguar se ha utilizado desde el Banco de América en 2023 bajo el término Jaguar -Conomics, buscando posicionar a Costa Rica en el ámbito global. También han enfatizado que el partido gobernante no posee un partido político registrado que utilice el símbolo del jaguar en su denominación, lo que refuerza su argumento de que la controversia carece de fundamento.
Yamileth Angulo
El mundo CR