San José, 8 de mayo (Elmundo.cr) – El diputado de Liberación nacional, Andrea Álvarez ha lanzado una severa advertencia a los costarricenses, instándolos a prestar atención a los llamados a la violencia que ha emitido el Presidente de la República, Rodrigo Chaves. Su preocupación surge a raíz de un video donde el presidente menciona: «Vamos a traer la hermosa frase de Churchill, nos molestaremos, sudar, lágrimas y si había necesidad, sangre. Dios no quiere».
Álvarez no ocultó su alarma y comentó: «en ese video se puede ver al presidente hablando de sangre en nuestro país. Esta es la primera vez que escucho a un presidente sugiriendo que si es necesario, se requeriría sangre. ¡No podemos permitir eso!». Esta declaración ha generado una considerable tensión entre los ciudadanos, quienes se ven afectados por las implicaciones de tales palabras en un contexto ya frágil.
El legislador también criticó la narrativa que ha intentado establecer el gobierno en los últimos tres años, describiendo a Rodrigo Chaves como un salvador y afirmando que está llevando a cabo acciones correctas para el pueblo. «Esto es una fantasía. El presidente solo se preocupa por no ir a la cárcel y por mantener su imagen de poder. Lo que demuestra es que no le importa la ciudadanía; evidentemente, los aliados aún no se han recuperado para lanzarlo debajo del autobús. Cuando critica la institucionalidad, no lo hace en beneficio del pueblo», agregó.
Además, Álvarez enumeró lo que considera defectos gravísimos en el carácter del presidente, señalando que no soporta las críticas, ni siquiera las menores. Para él, este rasgo es peligroso ya que puede llevar a decisiones impulsivas y autoritarias. «Si Rodrigo Chaves nos ataca a los delegados, no es por el bien de la gente. Este ataque surge de su incapacidad para enfrentar críticas sobre proyectos que no han salido como se esperaba y sobre ideas que son totalmente carentes de sentido», subrayó Álvarez.
La preocupación del diputado es clara: «Rodrigo Chaves es una amenaza para la democracia de este país», un punto que ha reiterado en varias ocasiones. La naturaleza de sus afirmaciones y actitudes podría amenazar las bases democráticas que sostienen a Costa Rica. Explicó también que si se habla de designar a 40 delegados en el futuro, es porque «en los próximos cuatro años, el presidente busca controlar la designación de magistrados y otros importantes puestos en las instituciones, de tal forma que se conviertan en cómplices, protegiéndolo de ir a la cárcel».
La comparación que realizó Álvarez entre la situación de Chaves en Costa Rica y el legado de Hugo Chávez en Venezuela es igualmente desalentadora. «Los ataques a la institucionalidad, la erosión gradual de la oposición y la creación de cortinas de humo son estrategias que se han utilizado para mantener a las masas aparentemente felices. Comprendo que es una comparación controvertida y debemos ser cautelosos, pero compañeros, no seamos hipócritas.»
«Les pregunto, colegas de la oposición, si este año estamos más unidos que nunca. Habrá tiempo para abordar nuestras diferencias, pero no caigamos en la trampa de la división en los últimos años. Porque el adversario más importante es el gobierno de la República. Y la prioridad más importante que deberíamos tener en 2026 es eliminar esa vergüenza nacional que es Zapote«, concluyó Álvarez, apelando a la necesidad de unirse contra lo que considera un régimen amenazante para la estabilidad del país.