San José, 23 de abril (Elmundo.cr) – El líder de la fracción oficial Cisneros pilar enfatizó la urgencia de abordar una problemática que ha crecido y que, según él, se ha convertido en una especie de monstruo que ha devorado una considerable parte de las finanzas del país debido al sistema de Pensiones de lujo. Este sistema, argumentó, consume casi el 10% de nuestro presupuesto nacional, y su sostenimiento se ha vuelto insostenible.
El diputado detalló que, tras tomar la decisión de otorgar pensiones a 40 delegados de los agentes del Agencia de Investigación Judicial (OIJ), se destinaron recursos considerablemente altos, ya que estos 55 pensionados representan una carga financiera notable para las cuentas públicas.
“¿Podemos darnos el lujo de seguir así? ¿Realmente contamos con los fondos necesarios para pagar sus pensiones diez años antes de lo previsto? ¿Es justo que continuemos manteniendo este monstruo de la desigualdad y la injusticia que representan las pensiones de lujo?» preguntó con visible preocupación el legislador, resaltando la necesidad de un análisis crítico sobre cómo se distribuyen los recursos en el sistema de pensiones.
Cisneros subrayó que «se supone que vivimos en una democracia donde todas las leyes son respetadas. Sin embargo, esto es un mito. Es una afirmación absolutamente falsa. Nuestra constitución establece que todos somos iguales ante la ley, y se afirma que debe existir un único régimen de pensiones administrado por la caja».
En su argumento, afirmó que «durante décadas, los políticos en el servicio público han creado y alimentado a un monstruo llamado Pensiones de lujo, que beneficia a un reducido grupo de ciudadanos con ingresos desproporcionados en comparación con lo que realmente han aportado, costando al gobierno alrededor de 265 mil millones de colones cada año», manifestó con descontento.
El legislador también expuso que múltiples proyectos destinados a «corregir esta injusticia» han sido obstaculizados por una oposición que, en su opinión, no está dispuesta a enfrentar la realidad del problema.
‘¿Acaso existen pensionistas de lujo en el sector privado? No, claro que no. Es evidente que todos los beneficiarios de este sistema abusivo pertenecen al sector público. ¿Y te preguntas por qué? La respuesta es sencilla, porque la carga de financiar estas pensiones inmorales e ilegales recae sobre ti, el ciudadano. ¿Realmente eres tú el que está pagando? Por supuesto, tienes la mano en la bolsa, mientras que un pequeño grupo continúa beneficiándose de esta situación. Este hecho pone al descubierto la crítica de la situación’, criticó profundamente.
Cisneros también se dirigió con severidad hacia la diputada Gloria Navas, quien había denunciado las pensiones de lujo como «un robo legal». Él advierte que se trata de un enriquecimiento ilegítimo que debería preocupar a todos. Al mismo tiempo, reconoció que «el problema es excepcionalmente delicado y debe manejarse con extremo cuidado para no comprometer los derechos fundamentales de los ciudadanos, ya que nosotros, como legisladores, estamos obligados a proteger el sistema legal costarricense».
«¿Por qué nuestros agentes de la OIJ apoyan la liquidación anticipada de sus pensiones? Esta no es una decisión responsable en absoluto. Según un estudio actuarial del poder judicial, si seguimos por este camino, el régimen comenzará a agotar sus reservas a partir de 2038, lo que representa un escenario alarmante», advirtió el legislador.
La Legislatura cuestionó: «¿Qué sucederá con las pensiones en el corto plazo si no abordamos estos abusos? Estas pensiones son inaceptables. Porque en un futuro cercano, todos los fondos de los diferentes regímenes de pensiones correrán el riesgo de agotarse. Y la pregunta inevitable que surge es: ¿cómo vamos a asegurar el pago a los pensionistas?»
«Nos encontramos ante dos alternativas, ya sea que no paguemos a nadie y enfrentemos un escenario donde todos los ancianos queden hambrientos, o por el contrario, tengamos que recurrir a medidas de austeridad para cubrir las consecuencias de decisiones irresponsables tomadas por la clase política de este país. La responsabilidad de frenar este monstruo de las pensiones de lujo recae sobre nosotros; es fundamental garantizar que nuestros hijos y nietos tengan acceso a pensiones dignas en el futuro», concluyó con determinación.