Hoy tenemos el placer de compartir una historia que realmente resuena con todos nosotros. Es un relato de determinación, esfuerzo y éxito, donde el compromiso de un individuo se traduce en logros significativos. Nos llena de orgullo saber que el talentoso atleta costarricense, Tico Randi Granados Paratra, ha alcanzado grandes metas en su carrera como paratleta. Recientemente, compitió en el prestigioso evento Open Capital para atletas en silla de ruedas, que se llevó a cabo en el Teatro Devoto, ubicado en Buenos Aires, Argentina.
Granados ha logrado destacarse en el mundo del deporte adaptado, y su victoria en este evento es un reflejo del esfuerzo que ha invertido en su entrenamiento. En una emotiva declaración, describió su experiencia al recibir el trofeo y la medalla:
«Cuando le pregunté si había ganado la felicidad, estaba completo. Después de recibir el trofeo y la medalla y dejar el escenario, cuando me suceden muchas cosas. He estado completamente concentrado desde que llegamos a Buenos, Entrenamiento, relajación, comida para recolectar resultados: primer lugar, el primero en mi carrera deportiva,»
dijo Granados, quien refleja una pasión y dedicación admirables. La alegría que sentía en ese momento no solo es un testimonio de su triunfo personal, sino también un ejemplo del espíritu competitivo y la resiliencia que caracterizan a los atletas como él.
Su triunfo en el Open Capital es aún más impresionante considerando que fue su segunda competencia internacional en la que logró enfrentar a atletas de renombrados países como Argentina, Colombia y Uruguay. Anteriormente, el 4 de abril, participó en el torneo Arnold Classic South America, que tuvo lugar en São Paulo, Brasil, donde se clasificó en cuarto lugar. Esta trayectoria no solo destaca su perseverancia, sino también su constante evolución como competidor en el ámbito del deporte adaptado, un campo que, sin duda, requiere no solo habilidad, sino también un inmenso coraje.
Sin embargo, la historia de Randi Granados es aún más inspiradora si se considera su pasado. A sus 43 años y originario de San José, sufrió un trágico accidente en 2015 cuando un camión colisionó con su vehículo, lo que resultó en la pérdida de sus piernas. A pesar de estas dificultades, su decisión de perseguir el éxito en el deporte es un ejemplo de superación que impulsa a otros a no rendirse. En sus palabras, se percibe una clara motivación para seguir adelante y su próximo gran desafío será en el Campeonato de Europa, que se celebrará en Londres, Inglaterra, en septiembre. Sin duda, todos estaremos pendientes de su próximo paso y le enviaremos nuestras mejores energías para que continúe cosechando éxitos.