BEIJING, 11 de abril (Xinhua) – En un contexto internacional marcado por tensiones crecientes, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Lin Jian, ha emitido un claro mensaje a Estados Unidos, afirmando que, si el país norteamericano realmente desea abordar y resolver los problemas actuales a través del diálogo y las negociaciones, deberá reconsiderar sus tácticas de máxima presión. Esta declaración fue realizada durante una conferencia de prensa regular celebrada el pasado viernes.
Lin enfatizó que China ha dejado en claro su posición en múltiples ocasiones respecto a la situación de los aranceles impuestos por Estados Unidos. «No existen verdaderos ganadores en las guerras de tarifas, al igual que en las guerras comerciales. China no tiene ninguna intención de participar en ese tipo de conflictos, pero tampoco tiene miedo de hacerlo si es necesario”, afirmó el portavoz de manera contundente.
Durante su intervención, Lin subrayó que cualquier diálogo entre las naciones debe estar fundamentado en la igualdad, el respeto mutuo y el beneficio recíproco. Resaltó la importancia de establecer un marco de negociación que no favorezca unilateralmente a uno de los participantes. «Si Estados Unidos persiste en escalar la situación a través de aumentos tarifarios y en la intensificación de las guerras comerciales, China está preparado para responder adecuadamente a este desafío y continuará haciéndolo hasta el final», aseguró Lin.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores también destacó que, como nación responsable en el ámbito internacional, las contramedidas adoptadas por China contra las tácticas de intimidación provenientes de Estados Unidos no solo buscan proteger sus propios derechos e intereses legítimos, sino que también se orientan hacia la defensa de las reglas internacionales y la justicia global. Las acciones de China, según Lin, son un reflejo de su compromiso con la legalidad y el orden global.
Lin hizo un llamado a la reflexión, afirmando que «frente a la hegemonía y la coerción de los EE. UU., el compromiso y las concesiones no constituyen opciones viables a largo plazo». Esta declaración resalta la postura firme de China ante las presiones externas, evidenciando un deseo de mantener su soberanía y sus derechos en un entorno internacional que a menudo presenta desafíos significativos. Este episodio reafirma la necesidad de un enfoque más conciliador y equilibrado en las relaciones diplomáticas, donde la colaboración y el respeto mutuo sean elementos centrales en la búsqueda de soluciones a conflictos globales.