En un reciente comunicado de prensa titulado «El Maamana del Pueblo«, el presidente de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha confirmado que su teléfono celular fue objeto de un robo de información, tal y como lo reportó ‘The New York Times’. Este anuncio se produce tras la entrega de 29 narcotraficantes mexicanos al gobierno de Estados Unidos, lo que ha generado una serie de especulaciones y preocupaciones sobre la seguridad digital de figuras públicas.
El presidente de México confirma que su teléfono celular fue hackeado tras la entrega de narcotraficantes a Estados Unidos.
Durante su discurso matutino, el Jefe del Ejecutivo reveló que la información proporcionada por los medios estadounidenses era certera y dejó claro que su teléfono había sido víctima de un ciberataque. Esto ocurrió inmediatamente después de la extradición de los 29 líderes criminales a la entidad norteamericana.
En su exposición, Sheinbaum Pardo aclaró que el dispositivo hackeado no era un teléfono personal sino uno que había utilizado durante la campaña presidencial de 2024. Este número de contacto había sido mantenido en uso, incluso después de su mudanza al Palacio Nacional, y todavía se conservaba en los registros de contacto de las autoridades locales en Tlalpan.

Recentemente, un artículo firmado por Natalie Citroff en el NYT alertó sobre el riesgo potencial de secuestro del presidente tras implementar acciones contundentes contra los cárteles de narcotráfico. Esto es más relevante dado que la extradición de estos criminales marcó un punto álgido en las tensiones diplomáticas entre México y Estados Unidos.
La entrega de los cárteles se formalizó a finales de febrero, y esta acción formó parte de las disputas diplomáticas en torno a la seguridad y la lucha contra el narcotráfico. Según reportes de los medios, se confirmó que el teléfono celular de Sheinbaum había sido interceptado luego de la extradición, respaldado por testimonios de diversas fuentes cercanas al caso.
Ante esta situación, Sheinbaum Pardo no dudó en confirmar las especulaciones, y dejó claro que la violación de seguridad no era para propagar información a fuentes externas. El presidente explicó que las afectaciones solo impactaron uno de sus teléfonos antiguos y un correo electrónico alternativo utilizado para asuntos gubernamentales en México.
«Si cortaron mi teléfono y mi cuenta de correo electrónico, no sé quién lo hizo. Apple contactó de inmediato a la Agencia de Transformación Digital, la cual actuó rápidamente, detectó el ataque y tomó las acciones pertinentes», afirmó.
El dispositivo en cuestión fue un regalo que le hizo el gobernador Layda Sansores durante el movimiento de Las Adelitas en 2008. Esto llevó a que Sheinbaum Pardo tuviera que recurrir a un nuevo teléfono que no le facilitaba una comunicación eficiente.
«Trabajé en UNAM y compré crédito para mi teléfono, pero simplemente dejé de funcionar. Layda me ofreció: ‘Te voy a dar este teléfono y cubriré los costos para que no tengas este problema'», recordó.
El presidente indicó que mantuvo el número incluso después de asumir el cargo en la Sede del gobierno en la Ciudad de México, permitiendo que varios ciudadanos lo utilizaran como un canal de comunicación directo con él. Aunque no lo utilizó de manera frecuente, era una forma de mantener viva una parte de su historia política.
Hasta el momento, no se tiene conocimiento de quién llevó a cabo el ciberataque, y las autoridades siguen investigando para mejorado el entorno de seguridad cibernética en el ámbito de la Presidencia. Fuente: Infobae
