
Una de las declaraciones más contundentes realizadas recientemente sobre la importancia de los tres puntos obtenidos en el primer partido del semestre ha colocado al entrenador costarricense Hernon Medford en el centro de la atención, lo que ha llevado a que su figura sea evaluada y analizada con mayor detenimiento. Medford, conocido por su estilo de juego agresivo y su dedicación al equipo, se ha enfrentado a un entorno competitivo cada vez más intenso, lo que ha requerido que su plantel muestre un esfuerzo significativo desde el inicio de la temporada.
El Comité Ejecutivo de la Liga Nacional de Guatemala ha tomado una decisión drástica en relación a la organización disciplinaria, pidiendo que se suspenda a Medford de todas las actividades relacionadas con el fútbol federado por un período de dos años. Esta medida es parte de un esfuerzo mayor por limpiar la imagen de la liga y asegurar que los entrenadores y jugadores actúen de acuerdo a los estándares deseados. Además, se impuso una multa de 100 mil quetzales, que equivale a aproximadamente 6.5 millones de colones, una sanción considerable que refleja la gravedad de la situación en la que se encuentra el entrenador.
En este contexto, la situación actualmente se encuentra en manos de la disciplina, cuyo equipo evaluador tiene la responsabilidad de dar la última palabra sobre el futuro de Medford en el club. Este proceso es crucial, ya que el equipo de Marquence ha experimentado dificultades en temporadas pasadas, llegando incluso a descender a la segunda categoría del fútbol de Chapin. Sin embargo, a pesar de estos retos, el club ha conseguido llegar a la próxima ronda de la zona de clasificación, lo que le brinda la oportunidad de competir por el título de campeón nacional. La capacidad de Medford para guiar a su equipo hacia el éxito en esta fase es más importante que nunca, especialmente en un entorno donde la presión está en aumento y las expectativas son altas. Así, la historia de Medford continúa desarrollándose, en un marco de incertidumbre y expectativa que promete mantener a los aficionados al borde de sus asientos.