Ginebra, 3 de abril (Xinhua) – La Gerente General de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, ha expresado su seria preocupación respecto al deterioro actual del comercio global y los riesgos de un estallido de una guerra arancelaria más profunda que podría intensificar las tensiones entre los países. Este llamado a la atención surge en un contexto donde las relaciones comerciales internacionales están cada vez más sometidas a tensiones debido a las decisiones unilaterales adoptadas por distintas naciones.
Iweala subrayó que las medidas arancelarias impuestas por Estados Unidos podrían tener «implicaciones significativas en las perspectivas de comercio mundial y en el crecimiento económico general». Esta afirmación pone de relieve la relevancia de la política comercial estadounidense y su impacto en la economía global, generando preocupación en muchos países que dependen del comercio exterior para su desarrollo y estabilidad económica.
Según sus estimaciones, las nuevas políticas arancelarias que se han implementado desde el comienzo del año, junto con las que se anunciaron recientemente, podrían provocar una contracción general del comercio mundial de aproximadamente un uno por ciento en términos de volumen para el año 2025. Este pronóstico es alarmante, ya que representa una caída de cuatro puntos porcentuales en comparación con las proyecciones anteriores, evidenciando un desacuerdo y un enfriamiento del comercio internacional.
La OMC está realizando un seguimiento cercano y un análisis exhaustivo de las medidas que el gobierno estadounidense ha anunciado el 2 de abril. Iweala comentó que muchos miembros de la OMC han manifestado su preocupación y que la organización está trabajando activamente para abordar estos temas, colaborando con los países para entender mejor sus inquietudes en relación a sus economías y cómo se integran en el sistema de comercio internacional.
En su discurso, Iweala enfatizó que, a pesar de las turbulencias, la mayoría del comercio global todavía se rige por las condiciones de nación más favorecida (NMF), aunque se ha registrado una caída, situándose actualmente en un 74 por ciento en comparación con aproximadamente el 80 por ciento que prevalecía a comienzos del año. Este descenso sugiere un cambio en las dinámicas comerciales que podría afectar a diversas economías alrededor del mundo.
Ante la advertencia sobre la posibilidad de desviaciones significativas en el comercio debido a las acciones comerciales recientes, Iweala instó a los miembros de la OMC a evitar que las tensiones comerciales se deterioren aún más, fomentando un diálogo constructivo y buscando maneras de cooperación y entendimiento mutuo. En este sentido, es crucial que los países trabajen juntos para prevenir una escalada en las disputas comerciales.
El miércoles, se hizo un anuncio determinante por parte del presidente de los Estados Unidos, quien reveló una nueva serie de tarifas a ser impuestas. A partir del 5 de abril, se implementará una tasa base del 10 por ciento sobre todas las importaciones, complementada por aranceles recíprocos individualizados que afectarán a varios socios comerciales con los que Estados Unidos tiene las relaciones comerciales más significativas. Esta medida está programada para entrar en vigor el 9 de abril, lo que seguramente añadirá más tensión al escenario comercial global.