Un altar en memoria de Kendall y Keylor Murillo Quesada, 2 de los menores que murieron en la lucha contra incendios, se crió en el Centro de Educación de Desamparados.

Esta es la escuela Sotero González Barquero, donde los funcionarios decidieron honrar a los 2 estudiantes, uno que fue el primer título y el otro en el sexto nivel.

Además, se colocaron flores blancas en los escritorios de los menores, como parte de la intención de recordarlas después del incidente.

Kendall acaba de hacer una coexistencia con sus compañeros de clase en la sexta clase, después de estudiar toda la escuela en esa escuela.

Si bien Keylor solo comenzó el curso principal, también estaba en el jardín de infantes del Centro de Educación.