Río de Janeiro, 1. Agosto (Xinhua) – Presidente de Brasil, Louis, Silva, dijo que su país siempre estaba abierto “, como una pipa, en medio de las crecientes tensiones bilaterales debido a la imposición de nuevos aranceles.
A través de sus redes sociales, enfatizó que “quién define los países de Rumbos son brasileños y sus instituciones”, y enfatizó que su gobierno está trabajando en “nuestros trabajadores y nuestros trabajadores dan auriculares”.
La transición de las declaraciones ocurrió durante unas horas después de que Trump respondió a la cadena del globo de TV sobre la posibilidad de contacto directo con una tubería. El presidente de los Estados Unidos dijo que “puede hablar conmigo cuando quiera”, aunque evitó confirmar si alguna negociación está programada.
A pesar de la aparente apertura de la señal, los medios de comunicación brasileños informaron que no hay comunicación directa entre el gobierno y que los canales diplomáticos con una Casa Blanca todavía están cerrados.
Según fuentes diplomáticas, una posible llamada de Lula requeriría la preparación previamente política y diplomática para la garantía de una conversación productiva.
Trump firmó la orden ejecutiva el miércoles que establece una nueva tasa del 50 por ciento, alegando que ciertas prácticas del gobierno brasileño afectarán a las empresas estadounidenses, limitando la libertad de expresar a los ciudadanos del país y comprometer los intereses estratégicos.
Además de la nueva tarifa, Trump anunció algunas sanciones contra el Ministro de la Corte Federal Suprema en Brasil, Alexandre de Morales, bajo la ley magnética, que castigó a las autoridades extranjeras acusadas de presuntas violaciones de los derechos humanos.
