La “banda de acetileno” llegó a las oficinas administrativas de Coca Cola Company con el objetivo de utilizar un cajero seguro y cajeros automáticos de una entidad bancaria en las instalaciones de la compañía.

Mientras esto sucede, varios sujetos saltaron contra una pared y luego llegaron al guardia de seguridad privado para inmovilizarlo y luego bloquearlo en una oficina.

Para no ser detectados, los delincuentes habrían reducido el sistema de supervisión de video, pero un sistema de monitoreo en la capital se dio cuenta del incidente.

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Los delincuentes usaron acetileno para cruzar las paredes y tratar de alcanzar efectivo, pero la advertencia del poder público hizo que los funcionarios llegaran al terreno.

La autoridad de las autoridades causó que dos personas que huyeron a un vehículo fueran arrestadas a unos 300 metros de la compañía en cuestión.

Otros sospechosos habrían huido en un nuevo automóvil eléctrico, que abandonó unos tres kilómetros de donde tuvieron lugar los eventos.