Óscar Arias Sánchez, ex presidente de la República de Costa Rica y galardonado con el Premio Nobel de la Paz, ha expresado su opinión acerca de la reciente decisión del gobierno de los Estados Unidos de revocar su visa. En una conferencia de prensa convocada para abordar este tema, Arias compartió que recibió un aviso por correo electrónico la mañana del 1 de abril. Este mensaje fue breve y no brindó razones detalladas detrás de esta drástica medida.
Arias señaló: «Uno puede tener sus suposiciones sobre cuál puede ser la razón, pero no tengo una versión española de la publicación». Con esta afirmación, dejó claro que la falta de claridad en la comunicación del gobierno estadounidense lo deja en una situación de incertidumbre, ya que no entiende del todo el fundamento de la decisión. Además, explicó que el documento que recibió alude a la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que podría ser la justificación técnica para el retiro de su visa de entrada a Estados Unidos.
Continuó su declaración diciendo: «Lo que puedo decir es que es una sorpresa porque no sé las razones y que se supone que debo hacer del Departamento de Estado la decisión». Esta afirmación evidencia su desconcierto y su deseo de comprender los motivos detrás de una decisión que impacta a una figura pública de su magnitud. Arias ha dedicado toda su vida a la defensa de causas sociales y políticas que han marcado su trayectoria durante más de 50 años en el ámbito público, no solo en Costa Rica sino en otros rincones del mundo.
En su intervención, no dejó de criticar la tendencia de Estados Unidos a invertir en la compra de armas militares. Este ha sido un tema que ha defendido durante años, instando a los gobiernos a destinar más recursos a satisfacer las necesidades humanas en lugar de potenciar conflictos armados. Su enfoque ha sido siempre hacia la paz y el bienestar de la sociedad, en un contexto global a menudo marcado por la violencia.
Arias recordó también su experiencia al redactar un plan de paz en medio de la Guerra Fría, un esfuerzo que implica su primera visita a Washington en 1986, donde asumió el liderazgo como presidente de Costa Rica con el objetivo de abogar por la protección y los derechos en América Central. Su vínculo con el país norteamericano fue significativo, ya que expresó: «Es un país donde estudié, un país donde mis dos hijos recibieron educación universitaria y donde coincidí con muchas de sus políticas, pero siento que tienes adversarios en la democracia, y la verdad es que la crítica siempre me ha servido para fortalecer mi espíritu».
Concluyó su intervención afirmando que aceptaba la decisión del gobierno de Washington, reconociendo el derecho que tienen a tomar dicha acción. En estos momentos, Óscar Arias Sánchez se posiciona como el político más importante y reconocido en Costa Rica al que Estados Unidos ha decidido revocar la visa, un episodio que sin duda añade una nueva capa de complejidad a sus ya largas y turbulentas relaciones diplomáticas.