AFP (Miami, Estados Unidos) – El equipo de Lionel Miami sufrió una dura derrota el pasado miércoles, al caer 3-1 frente a Vancouver, lo cual resultó en un marcador global de 5-1 en las semifinales de la Copa de Campeones de Concacaf. Este resultado dejó a los fanáticos y jugadores sorprendidos y desilusionados, ya que las expectativas estaban puestas en avanzar a la final.
El primer gol del encuentro llegó muy temprano, cuando el español Jordi Alba abrió el marcador al minuto 9. Este gol representó un duro golpe para el equipo estadounidense, que ya enfrentaba dificultades tras haber comenzado la serie con una desventaja de 2-0 en la primera fase. Aún así, el equipo canadiense no se conformó y siguió buscando ampliar su ventaja. Vancouver continuó su embestida y logró marcar otro gol a través de Brian White en el minuto 51, seguido por un tanto de Pedro White en el 53. Para añadir más presión, Sebastian Birhalter también anotó en el minuto 71, consolidando la victoria canadiense en un partido que terminó con un dominio claro.
Con este triunfo, Vancouver se asegura un lugar en la final de la Copa de Campeones, programada para el 1 de junio. Su rival se determinará entre los ganadores de las otras semifinales, donde mexicanos como Tigres y Cruz Azul se perfilarán como contendientes fuertes. Este éxito marca un hito importante para el equipo canadiense, que finalmente disputará su primera final en la historia del torneo.
La eliminación de Lionel Miami representa un gran golpe a las aspiraciones del equipo, que había tenido un comienzo prometedor en la temporada. La ambición del plantel se centraba en conquistar títulos internacionales, especialmente en el último año del contrato de Messi, quien ha sido un pilar fundamental en el equipo. Las esperanzas de los aficionados eran altas, alimentadas por la estrella argentina y sus actuaciones sobresalientes desde su llegada al club estadounidense.
La Copa de Campeones de la Concacaf ha sido vista como un objetivo primordial para el equipo inter, que también espera ser competitivo en la Major League Soccer (MLS), buscando capturar su primer título de liga. Asimismo, la intención es dejar una fuerte impresión en la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, donde los equipos de América del Norte tienen la oportunidad de enfrentarse a las mejores escuadras del mundo.