En la mañana de este sábado, ocurrió un violento tiroteo en la zona de Concepción de Alajuelita, donde cuatro hombres resultaron con heridas de bala. Este incidente ha dejado a la comunidad en estado de alerta, dada la naturaleza inesperada y agresiva del ataque. Según los informes iniciales, los hechos se desarrollaron alrededor de las 02:40 de la madrugada, cuando dos motocicletas, cada una con dos individuos a bordo, llegaron al lugar y empezaron a disparar indiscriminadamente.
Las víctimas, que no estaban relacionadas aparentemente entre sí, se encontraban en el pasillo de una vivienda cuando fueron sorprendidas por los disparos. Este tipo de violencia ha generado preocupación entre los residentes de la zona, que se preguntan sobre la seguridad en sus comunidades. La Agencia de Investigación Judicial (OIJ) ha tomado el control del caso y está realizando las indagaciones pertinentes para tratar de dar con los responsables de este ataque inesperado. Testigos informaron que los agresores no intercambiaron ninguna palabra antes de abrir fuego y, tras llevar a cabo la agresión, huyeron rápidamente del lugar en las motocicletas.
Los hombres que resultaron heridos son identificados como Campos, Rojas, Calderón y Alfaro. Según los reportes médicos, cada uno de ellos sufrió lesiones graves. En particular, Campos fue lesionado en el abdomen y tórax, poniéndolo en una condición crítica. Rojas, por su parte, recibió un disparo en el área lumbar, lo que también plantea serias preocupaciones sobre su estado de salud. Calderón, quien tuvo el impacto en el muslo izquierdo, y Alfaro, que resultó herido en la parte derecha de su cuerpo, han sido ingresados en el mismo centro asistencial, el Hospital San Juan de Dios.
Es importante mencionar que, según las versiones preliminares sobre el incidente, se menciona que una de las víctimas tiene apenas 18 años de edad. Esto ha generado una discusión sobre el impacto de la violencia armada en los jóvenes y cómo estos incidentes afectan a la sociedad en su conjunto. Las autoridades están trabajando arduamente para clarificar las circunstancias que rodearon este ataque y establecer un perfil de los agresores.
Hasta el momento, no se tiene conocimiento de los motivos detrás de este ataque, y las investigaciones continúan a medida que se recopila información adicional y testimonios de posibles testigos. La comunidad espera que se tomen medidas efectivas para prevenir futuros episodios de violencia, así como un aumento en la vigilancia policial en la zona. Este acontecimiento subraya una vez más la urgencia de abordar la problemática de la criminalidad y la seguridad pública en la región.
