Washington, 2. Maja. – El presidente Donald Trump ha tomado una decisión significativa al eliminar este viernes la laguna de aduanas que había permitido a los productos procedentes de China ingresar al mercado estadounidense sin el pago de tarifas. Este cambio ocurre en medio de una guerra comercial que ha generado tensiones y desafíos económicos, según informes del New York Times.
Los proveedores que operan desde China ya no podrán beneficiarse de la famosa regla de minimis, la cual permitía que productos con un valor de hasta 800 dólares fueran enviados directamente a consumidores estadounidenses o a pequeñas empresas sin que se les cobraran tarifas de importación. Esta normativa facilitó que diversas empresas importaran bienes de manera sencilla en los últimos años, contribuyendo al auge de tiendas en línea que comercializan artículos asequibles fabricados en China. Este año, la Administración de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos ha procesado operaciones bilaterales significativas, con un total de billones de dólares procesados en productos que, de promedio, tienen un valor de 54 dólares.
¿Cuál es la razón detrás de esta decisión?
Trump ha calificado esta laguna legal como un mero «fraude» y lo describe como un «engaño» que perjudica a la nación y a las pequeñas empresas legítimas. Esta decisión se ha fundamentado, en parte, en preocupaciones sobre el uso de la regla para enviar Fentanil a Estados Unidos, ya que menos información es requerida para el despacho de pequeños paquetes por parte de las autoridades aduaneras. Además, el alza de envíos que se produjo tras la expiración de la Guerra de Tarifas planteó riesgos para los empleos en el sector de almacenamiento y logística en el país, al aumentar los paquetes enviados a consumidores directamente, en detrimento de los almacenes y de la infraestructura logística estadounidenses.
La existencia de esta laguna también ha sembrado descontento entre los fabricantes estadounidenses. Kim Voice, presidenta del Consejo Nacional de Organizaciones Textiles Americanas, ha afirmado que esta norma ha «destruido la industria textil estadounidense», dado que otorgaba efectivamente a China un acceso casi sin restricciones al mercado estadounidense. Voice subrayó que más de la mitad de las importaciones aprovechando esta laguna consistían en productos textiles, lo cual ha generado un efecto negativo en las industrias locales.
Críticas a la medida
A pesar de la justificación de la acción tomada por el presidente, la medida también ha encontrado una sólida oposición. El hecho es que la eliminación de esta laguna ya ha comenzado a aumentar los costos de numerosos productos para los consumidores en Estados Unidos. Además, esta decisión trae consigo el riesgo de afectar a muchas pequeñas empresas estadounidenses, así como a diversas aerolíneas y entidades de transporte como FedEx que dependen de los envíos internacionales.
Gabriel Willou, analista de Teneo, ha destacado que «estos son costos directos que impactarán a los consumidores estadounidenses, quienes realmente habían disfrutado del acceso a productos al alcance de sus manos gracias a precios competitivos.» Esta controversia seguramente permanecerá en el debate público mientras las repercusiones de la decisión de Trump continúan desarrollándose.
