México, 3 de abril (Xinhua) – La reciente acción llevada a cabo por el gobierno de los Estados Unidos introduce un cambio significativo en la dinámica del comercio internacional y plantea serias preocupaciones sobre el futuro económico global. Según la confederación del empleador de la República Mexicana (Coparmex), esto no sólo representa una modificación en las políticas comerciales, sino que también se vislumbra como un posible fracaso que podría agravar la desaceleración del crecimiento en diversas economías a nivel mundial.
El anuncio de las nuevas tarifas se produce en un contexto donde la economía global enfrenta «desafíos significativos». Este entorno económico adverso impacta negativamente en las cadenas de suministro y provoca un aumento de los costos para los consumidores en varios países. La confederación empresarial mexicana advirtió que estas circunstancias podrían tener efectos colaterales de gran alcance que perjudicarían la estabilidad económica tanto en México como en sus socios comerciales.
Ante esta difícil situación, Coparmex ha instado al gobierno mexicano a fortalecer las condiciones internas que fomenten un clima propicio para la inversión y el crecimiento económico. Esta llamada de atención subraya la importancia de adoptar políticas que promuevan la estabilidad y la seguridad en el país.
La confederación ha señalado como «prioridad» la necesidad de garantizar la seguridad, tanto en términos físicos como económicos, así como la importancia de generar un entorno energético sostenible y proporcionar certeza legal. Además, enfatizan la necesidad de reducir la carga burocrática para facilitar el desarrollo empresarial. La creación de un marco adecuado para el negocio es fundamental para que México pueda afrontar los desafíos globales y aprovechar al máximo las oportunidades que presenta el comercio internacional.
La perspectiva de los empresarios también se alinea con la opinión del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, quien había anunciado medidas de aranceles recíprocos contra un gran número de países, justificándolas bajo el argumento de prácticas comerciales desleales. Este enfoque de tensión que busca proteger los intereses económicos de los Estados Unidos plantea desafíos adicionales y complicaciones en las negociaciones comerciales, así como en las relaciones diplomáticas…