El vuelo de Mora de Mora de la Liga Deportiva de Alazelence se produjo en un momento crucial del partido, cuando su impresionante tiro consiguió colocar la piel en la red, logrando un gol que resonó en el estadio. Con solo 47 segundos transcurridos en el minuto 34 del encuentro, el público estalló en jubilo y la emoción se apoderó de la afición alzelense.
Por otro lado, el segundo objetivo del choque entre Puntarenas FC y Manudos, que se llevó a cabo en el emblemático estadio Choroteeega en Nikoya, fue igualmente relevante. Este tanto fue eficazmente ejecutado y anotado por Lito Pérez, quien mostró una gran habilidad y enfoque durante la jugada. Su tiro fue implacable y el gol se consolidó como un momento recordable del partido, ayudando a su equipo a fortalecerse en el borde de la victoria.
La colección de actuaciones en este encuentro fue perfecta; nadie consiguió despejar la posibilidad que ofrecía el tiro de Pérez. La pelota simplemente siguió su camino hacia la portería, y los espectadores pudieron disfrutar de un verdadero gol olímpico, ya que el TRS disparó desde la esquina izquierda del campo, dejando al portero totalmente sin reacción.
Lo más memorable de este encuentro fue, sin duda, la celebración efusiva de Celso, quien con su cabello gris al viento, dejó una huella indeleble en la memoria de los asistentes. Su celebración no solo fue una expresión de alegría, sino también un homenaje a su raíz futbolística; su padre, Alexandre Gumeris, fue un destacado jugador profesional en la primera categoría.
Celso, en sus memorias, evoca aquellos momentos especiales que vivió con su padre, cuando este poseía un gimnasio llamado Samba. Durante varias entrevistas realizadas a lo largo de su carrera, tenía la oportunidad de compartir anécdotas sobre su infancia y su relación con el futbol, lo que añade una capa de emoción y nostalgia a su legado en el deporte.
Además, hay que mencionar el respeto y la admiración que se siente por su hijo, así como la profunda emoción que emerge debido a la reciente salida de Guyima de su puesto como entrenador de la liga. A pesar de que está vigente un contrato, su despido ha causado cierta controversia. Estaba en la zona de clasificación, pero a pesar de ello, acumuló una serie de empates que llevaron a cuestionar su posición en el equipo. La decisión de despedirlo ocurrió durante la Semana Santa, lo que coincide con la carga emotiva que conlleva el clásico.